Y viendo…

Lunes, pero esta vez un lunes diferente: si lees esto desde los Jereles lo harás seguramente con resaca y tarde… vamos que ayer te pusiste de fino hasta que el cuerpo pidió el comodín del “Taxi para casa”.

Déjame que te cuente una pamplina que me pasó ayer. Te pongo en situación: los bajos del pantalón con más albero que el miedo de un torero malo, la cartera vacía, el vaso lleno, la sonrisa encajada y la mirada encontradiza con la del camarero. Todo en orden cuando escucho a una flamenca con más ferias en lo alto que un puesto de turrón del duro decir: “VIVA LA ALEGRÍA CARAMBA”

No hay mayor frase de agradecimiento a la vida: “VIVA LA ALEGRÍA”. Y una Feria es un alegato a la vida, y más que a la vida a saber vivirla.

Siempre he pensado una cosa: Dios hizo el mundo en 6 días, hasta aquí todo correcto, al séptimo descanso, hasta aquí sigue la cosa correcta, pero luego, querido,  ¿Qué pasó luego?…

Y viendo que el patio le había quedado sosete al octavo día mi Vecino miró hacia el Sur y creó: los lunares, el fino, los farolillos secos, el albero, las mujeres de gitana, los catavinos bien cogidos, las tajás de los cuñaos, las miraditas cuando bailas la segunda, los besos en la tercera…y los te quieros de la cuarta.

Y viendo que su gente se animaba creó: la sonrisas en los coches locos, la penúltima, la penúltima después de la penúltima, los “montaitos” de lomo, las flores en todo lo alto, los nudos de las corbatas, invitar sin dinero, las bulerías, el ambiente, las barras y sus camareros…y los que invitan desde el cielo.

Y viendo que todo encajaba saco la escoba y el recogedor y barrió: la pena, los entrecejos fruncidos, al que estaba aburrido, a los que hablan de dinero, los farolillos del suelo…y la negatividad de su Reino.

Y viendo mi Vecino que algo faltaba miró a su Madre y al verla le salió del alma la ALEGRÍA, y viendo que había creado la alegría se mesó la barba, se puso en pié y sonrió…y de esa sonrisa salió Jerez en Feria.

¡SONRÍE! La alegría la llevas tú en tu entrañas, la llevas y la repartes si quieres. Que no hay nada en el mundo que honre más a una persona que repartir su alegría…y es que querido amigo a las personas alegres las creó Dios con su sonrisa.

¡VIVA LA ALEGRÍA CARAMBA!

Total
0
Comparte
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticia anterior

La Feria de las cofradías

Próxima noticia

Cultos en honor de María Auxiliadora