Anoche, en el decimosexto programa de ‘La Levantá’ en LaFM, tuvimos la oportunidad de acercarnos a los orígenes de la devoción hacia el Niño Jesús de Praga, que se venera en la Iglesia de Santa María de la Victoria y San Antonio de Padua de la capital de la República Checa.
Una advocación que, según cuenta la leyenda, hunde sus raíces en tierras andaluzas, puesto que se cree que la imagen del Divino Infante fue tallada en el Siglo XVI en un Monasterio ubicado entre Sevilla y Córdoba.