Jerez se encuentra, desde la jornada de ayer, en el nivel 4 de la alerta sanitaria decretada por la Junta de Andalucía, máxima escala restrictiva en nuestra comunidad autónoma que impide, entre otras restricciones, la salida del municipio. Estas medidas, unidas al estado de alarma decretado en España, están afectando nuevamente a las actividades religiosas de la Diócesis de Asidonia-Jerez y, por tanto, a la de nuestras hermandades y cofradías.
Estas limitaciones, que están afectando tanto a los cultos como a la vida diaria de las hermandades, han provocado las primeras suspensiones de actos previstos para los próximos días, como el Rosario de la Aurora que la Hermandad del Cristo de la Expiración tenía previsto celebrar este domingo día 1 de noviembre o los cabildos generales de hermanos de Las Angustias -el 5 de noviembre- y de Las Tres Caídas -el 6 de noviembre-.
Un panorama nada halagüeño, ya que con la aprobación de la prórroga del estado de alarma hasta el próximo mes de mayo se descarta la celebración de la Semana Santa tal y como la conocemos.
Orientaciones pastorales
El Administrador Diocesano, Federico Mantaras Ruiz-Berdejo, anunciaba ayer unas orientaciones pastorales ante estas nuevas circunstancias que se nos presentan, en las que recomendaba, entre otras directrices, aumentar el número de misas para atender la necesidad de los fieles, facultando a los sacerdotes a que celebren varias misas dominicales, ya que hasta que no cambie el nivel de alerta los templos tendrán un 30% de aforo máximo.
