El retablo cerámico dedicado a Nuestra Madre y Señora de la Soledad fue retirado en la jornada de ayer de la fachada de la Iglesia de la Victoria para su recuperación en el taller sevillano de Isabel Parente, afamada especialista en la restauración de azulejería y piezas cerámicas antiguas.
Algo más de nueve horas necesitaron los operarios de la empresa Ágora Restauraciones de Arte para retirar en una sola pieza este azulejo pintado por el artista sevillano Antonio Kiernam Flores y fabricado en 1944 por Cerámica Santa Ana en la trianera calle San Jorge.