A partir del próximo ejercicio fiscal, miles de trabajadores españoles verán aliviada su carga tributaria gracias a una nueva medida incluida en la Ley 5/2025, ya en vigor y con efecto retroactivo desde el 1 de enero de este año. El objetivo es claro: ofrecer un respiro económico a quienes perciben salarios modestos, en un contexto de inflación y encarecimiento de la vida diaria.
La norma, publicada en el Boletín Oficial del Estado, establece una deducción extraordinaria de hasta 340 euros en el IRPF destinada a los contribuyentes con ingresos más bajos. Este incentivo no sustituye a las reducciones ya existentes, sino que se suma como un extra, y será aplicado automáticamente por la Agencia Tributaria en la próxima campaña de la renta de 2025 (a presentar en 2026).
¿Quién podrá beneficiarse de esta deducción?
El beneficio fiscal está dirigido a quienes tengan ingresos anuales por trabajo inferiores a 18.276 euros y no perciban más de 6.500 euros por otras rentas (como alquileres o intereses). En su tramo máximo, la ayuda alcanza los 340 euros para aquellos con salarios iguales o inferiores a 16.576 euros. A partir de esa cifra, la deducción se reduce progresivamente según la fórmula fijada por la ley.
La aplicación será sencilla: no será necesario presentar ninguna solicitud especial, ya que el importe se incluirá en el borrador de la declaración. No obstante, Hacienda recomienda revisar los datos fiscales para confirmar que los ingresos se han registrado correctamente y que la deducción se aplica de forma adecuada.
Otros cambios relevantes de la Ley 5/2025
Además de esta deducción, la nueva norma introduce novedades en distintos ámbitos:
- Devoluciones de IRPF por mutualidades correspondientes a 2019-2022, que podrán solicitarse mediante un nuevo sistema de apoderamiento electrónico.
- Modificación del Seguro Obligatorio Deportivo, que fijará su cuantía mínima mediante reglamento en los próximos seis meses.
- Declaración de la IV Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo como acontecimiento de excepcional interés público, con incentivos fiscales especiales.
Con estas medidas, el Ejecutivo busca combinar el alivio fiscal para los ciudadanos con una serie de ajustes normativos que abarcan desde el deporte hasta la cooperación internacional. Para muchos trabajadores, esta deducción supondrá una inyección directa en el bolsillo, capaz de marcar la diferencia en la economía doméstica.