“Amnistía” para el anterior hermano mayor de la Hermandad de la Yedra

Queda anulada al inhabilitación impuesta a Manuel Hurtado Macías

El obispo de Asidonia-Jerez, monseñor Rico Pavés, tras la reunión mantenida el pasado día 13 de octubre con el anterior hermano mayor de la Hermandad de la Yedra, en presencia de su teniente hermano mayor y del vicario general de la Diócesis de Asidonia-Jerez, ha comunicado este jueves la anulación de la inhabilitación del Hermano Mayor y la equiparación de la sanción a todos los miembros de la anterior Junta de gobierno de la Hermandad de la Yedra, entendiendo la amonestación como la corrección fraterna (art. 87 NDHC) para que se actúe con mayor vigilancia en el futuro, evitando decisiones que se alejen de la comunión eclesial custodiada por la Normativa diocesana de Hermandades y Cofradías.

Hay que recordar que el pasado mes de junio, justo antes de la celebración del Cabildo General Extraordinario de Elecciones en la Hermandad de la Yedra, el vicario general de la Diócesis de Asidonia-Jerez firmó, en nombre del obispo, el documento que establecía la inhabilitación por dos años del hermano mayor y la amonestación de los demás miembros de la junta de gobierno de la Hermandad de la Yedra por el traslado e ingreso de la imagen de Ntro. Padre Jesús de la Sentencia y Humildad a la Ermita de San Telmo sin autorización para ello, así como la bendición del Guión de la Hermandad al no constar solicitud de permiso para su realización en la Delegación Diocesana de Liturgia, Patrimonio y Arte Sacro, ni aprobación de la Vicaría General de la Diócesis de Asidonia-Jerez.

Según la clarificación del obispo, el objeto de la reunión del día 13 de octubre fue tratar, desde el diálogo personal, la sanción comunicada al hermano mayor y a la junta de gobierno de la Hermandad de la Yedra el pasado mes de junio, así como las reacciones que acontecieron posteriormente.

En dicho encuentro se constató la importancia de que la reunión se hubiera celebrado antes, justo después de los hechos acontecidos que provocaron la sanción. De haber mantenido un encuentro sincero cuando ocurrieron, se podrían haber evitado las reacciones siguientes, la sanción, la aclaración episcopal posterior, las interpretaciones y reacciones sucesivas, que tanto desgaste han generado a todas las partes.

Según monseñor Rico Pavés, el diálogo sincero y respetuoso permitieron abordar los hechos señalados, esclareciendo las interpretaciones que se dieron de los mismos por parte tanto de la junta de gobierno de la Hermandad de la Yedra como de las distintas instancias implicadas de la Curia diocesana. La clarificación de los hechos repasados permitieron advertir algunas actuaciones ciertamente incorrectas por parte de la junta de gobierno sancionada. Desgraciadamente, esas actuaciones también se dan en otras hermandades y su penalización no siempre está suficientemente señalada en la actual Normativa diocesana de Hermandades y Cofradías, reglamento que necesita una actualización para evitar estos desagradables episodios.

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