La Reina

Lunes, el primero de Mayo y día del trabajo. Trabajo el que me costó a mí volverme de la Feria de Sevilla ayer. Y mira que a mi eso de beber, charlar, bailar y disfrutar no me va nada, pero se ve que ayer me cogieron con la guardia baja y mira, aún ando con la flor en la pechera y la corbata de lunares.

Antes de nada me gustaría pediros comprensión por si la pamplina de hoy huele a fino o me salen los renglones torcidos, ¡Uy! Disculpadme un segundito que voy a tomarme un ibuprofeno y ahora vuelvo.

Gracias señores por esperaros ahí, pero es que tengo en la cabeza media Filarmónica de Londres  tocando “Coronación Macarena” con gaitas.

Pues eso que ya estamos en Mayo, y Mayo es el mes de Ella.

“El mes de María”. Mira si somos afortunados que la Virgen María, sí la Vecina guapa que tenemos en el barrio, también es nuestra madre. Ole ahí. Que además de la terrenal tenemos una madre de guardia para el resto de nuestras vidas.

Siempre he dicho que cuando su hijo nos ordene el “venga de frente definitivo”, Ella estará allí, al otro lado del puente, con los brazos abiertos y una sonrisa que nos hará olvidarnos de todo. Que sí, que al final del puente está Ella.

Hablando de puente; a mi cuñao -exacto, el que vive  en Sevilla Este- lo dejé en la portada ayer cuando los pájaros empiezan a ponerse impertinentes. Lo digo por si su mujer está leyendo esto que sepa que hasta mediados de Junio no creo que llegue, que me ha puesto un “wasap” y va aún por Soria. ¡Ánimo cuñao!

¡Ay la familia! Por cierto hay que ver que nos gusta pedirle a la Virgen cosas bonitas para la familia, me explico: a Él siempre le pedimos que nos saque de mil laberintos complicados, pero a Ella no, a Ella le pedimos otras cositas. Que si el embarazo de nuestra cuñá vaya bien; que si mi niño se arregle con la novia; que si mi nuera aprenda a coserle los 48 botones a la túnica.

Siempre Ella. Yo me la imagino sin corona, sin manto, sin pena, sin soledad, sin amargura, sin lágrimas, sin angustias…eso sí, con mucho amparo, con mucho consuelo, con mucha luz, con mucha…con mucha ESPERANZA.

¡SONRÍE! Tenemos la mejor compañera de viaje: Ella. La que nos dará el primer beso en la frente cuando ya no pintemos nada en esta vida…y es que, querido amigo,  aunque un Hijo haga cambiarnos de barrio siempre tendremos a la mejor Vecina: Ella.

PD: Cuñao las llaves de tu casa las tengo yo, vuélvete.

¡FELIZ LUNES. FELIZ SEMANA. FELIZ PRECUARESMA!

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